La reconstrucción del Faro en la Isla de los Estados

Diez hombres para dos rayos de luz.

A principios de 1998, diez hombres, amigos de Yul, desembarcan en la Isla de los Estados para reconstruir el Faro del Fin del Mundo.

La expedición se compone de carpinteros, dos pintores, un fotógrafo-camarógrafo, y un músico.

Durante seis semanas, estos hombres van a cargar en sus espaldas 15 toneladas de zinc y madera, para reconstruir el faro hexagonal en la punta San Juan de Salvamento.

El 26 de febrero 1998, en este fin del mundo austral, donde la tierra esconde todavía en sus entrañas los huesos de los aborígenes, la luz del faro se prendió de nuevo, resucitando estas almas y alumbrado el pasado.